Comunicado. 2 de junio de 2014 / Más allá del Referéndum. Necesidad de un Frente amplio y elecciones constituyentes / ASR Pedro A. García Bilbao
El mejor referéndum son unas elecciones en las que los republicanos —todos, de todas las tendencias posibles— confluyan en un Frente amplio por la República junto a los que se han manifestado contrarios a este régimen por motivos sociales o nacionales. Cuando se acude a unas elecciones con un compromiso republicano claro y valiente se está transmitiendo un mensaje y se está extendiendo una idea. «Pedir» referéndum cuando se es incapaz de acudir a las elecciones con un compromiso republicano explícito es sencillamente un engaño hacia los propios votantes. Ante la crisis abierta por la abdicación real se está apelando a la idea de referéndum por la república como única salida lo que sencillamente no es cierto; debe saberse públicamente que han existido otras opciones, otro plan, y que ese otro camino ha sido abandonado y ocultado para refugiarse en la idea de «referéndum». A la noticia de la abdicación se está empezando a producir una movilización popular sin precedentes. Vamos a estar ahí y donde haga falta y alzaremos muestra voz. Sin unidad e ideas claras no se podrá vencer esta batalla. Es preciso ponerse al SERVICIO de la REPÚBLICA. Hoy día 2, a las 20.00 acudiremos a las plazas y calles a decir que el mañana es nuestro.
Pedro A. García Bilbao
La noticia ha surgido hoy día 2 de junio. El Rey abdica y se abre el proceso de sucesión. La crisis institucional se suma a la social y de credibilidad de todo el régimen. La salida del Rey implica la entrada de uno nuevo, la Monarquía muestra así su potencial sistémico. Ha sido la Casa del Rey y el Estado los que han escogido el momento; debemos saber que es el que les conviene. ¿Con qué complicidades cuentan?
La reacción de la izquierda del PSOE, es decir, Izquierda Unida y PCE si nos mantenemos en el plano de la izquierda de ámbito nacional, es pedir un referéndum, que hable el pueblo. Pero curiosamente los dirigentes, los diputados y concejales no están saliendo a la calle a encabezar nada, a pedir nada y tampoco lo hacen en el parlamento o en las salas de prensa de las Cortes, se están comportando con el nivel mínimo de compromiso posible.
Se pide un referéndum al que el estado no está obligado constitucionalmente. ¿Alguna propuesta sobre como lograrlo? Ninguna, es solo una consigna vacía, aparente, que parece algo y colma superficialmente la sensación de que se precisa hacer algo. En realidad nada hay en las leyes y constitución que obligue a convocarlo en caso de abdicación. Es más, las propuestas de reformas constitucionales que pudieran exigir consultas en referéndum son en sí mismas sistemas de legitimación indirecta del régimen. El régimen del 78 tiene varios mecanismos de legitimación activables: la reforma constitucional votada en urnas, por ejemplo, es una posibilidad lejana a día de hoy, pero pasar por urnas una reforma ¡legitima la Constituciñon actual y al nuevo Rey que la ampare; una acción inminente será la ceremonia de la jura de la constitución del nuevo rey, y que no va a ser confrontada políticamente por los que hoy dicen querer un referéndum. Estamos ante un pulso a la nación desde un punto de vista republicano, y en nuestro brazo no ayudan todos los que dicen.
Un referéndum aceptable exige claridad, compromiso, unidad entre quienes lo promueven. Y equidad en el acceso a los medios de comunicación, incluso la neutralidad del poder. Nada hay de eso. Ni obligación siquiera. No van a ceder y la izquierda con representación lo sabe.
Que no nos la jueguen compañeros
El truco va a venir por el referéndum que se pide. Mientras lo pedimos, proclaman al REY, mientras protestamos coronan al nuevo rey, mientras pedimos referéndum el rey jura la constitución, mientras decimos ser republicanos, no acabamos de montar un Frente o Alianza Republicana. Convocaran elecciones más pronto o más tarde y entonces nos encontraremos con que quienes piden referéndum estos días dirán que la cuestión republicana no puede ser tema central de la batalla política, el programa o la estratega electoral.
Iremos a esas elecciones sin que la opción republicana figure en la batalla, y ¡claro!, luego «democráticamente» se aceptará el resultado y tendremos que oír por parte de los nuestros «que con la república no se ganan elecciones».
Cuando la Corona pasa por las urnas sin ser cuestionada por los candidatos, los programas y los partidos, se legitima. En las elecciones, la «izquierda moderna de la generación del príncipe» nos volverá a sacar que la República divide y que no es prioritaria… Si protestamos o si un nuevo escándalo sacude a la dinastía, esa izquierda nos volverá a sacar la consigna del referéndum.
Un referéndum legitima a los que lo aceptan. ¿hay abierto un debate sobré cómo se organiza y cuál es la lógica de un referéndum?
El Referéndum sobre cambio de régimen no debe ser organizado por quienes deseen mantener a toda costa el régimen anterior.
Un referéndum debe ir acompañado de señales inequívocas de RUPTURA POLITICA en quienes lo promuevan.
No basta con pedir solo el referéndum.
A quienes lo piden, para que sean creíbles, hay que exigirles una DECLARACIÓN INEQUÍVOCA al SERVICIO DE LA REPÚBLICA a partidos, sindicatos y asociaciones, y EXIGIR una ALIANZA o Frente Amplio por la República en los procesos electorales.
Tengamos claro que la República es nuestro derecho, que fue robada por un golpe, enterrada por una dictadura e ignorada y combatida por la transición. No se trata de una nueva república, sino de recuperar la nuestra. ¿Cuándo fue derogada legalmente la Constitución de 1931? Nunca lo fue.
Hay que subir la tensión y el compromiso.
No basta con pedir un referéndum, pero si se pide hay que proponer algunas cuestiones fundamentales.
Exíjase pero al tiempo que defendemos la República explícitamente, que cada partido, sindicato y organización, que cada cargo público allí donde esté declare ponerse al Servicio de la República pase lo que pase; es preciso construir una Alianza Republicana de amplia base, entre cuantos rechacen la continuidad de esta monarquía tapadera de todos.
Es precisa una Alianza o Frente capaz de actuar coordinadamente ante las diferentes situaciones que se planteen; ya no vale decir que la República no es prioritaria, o que divide, o que no tiene espacio en la política institucional. Ahora es el momento de la claridad política, de dejar atrás el pasado y construir la Tercera República sobre la base de un programa social y político que nos permita vencer hoy y ganar el futuro.
No basta con pedir el referéndum, si se pide y no se defiende la República con todas las fuerzas a nuestro alcance lo que tendremos ante nosotros es la Segunda Transición, un nuevo engaño.
Es necesario pensar en términos de estado y actuar con audacia.
Es necesario que existan condiciones democráticas para la consulta. ¿Las hay ahora acaso?
¿Se opta por el Referéndum pese a todo? Pues bien, marquemos nosotros los pasos a seguir. Podremos poner al descubierto a los que juegan con nosotros proponiendo caminos que no llevan a ninguna parte.
Declárense al Servicio de la República, cargos públicos, organizaciones, ciudadanos y ciudadanas… clara e inequívocamente.
Es necesaria ya una declaración de cargos públicos negando legitimidad a la Monarquía,y a la Constitución de 1978. Acúdase a todas las elecciones con un programa de construcción republicana.
Exijamos que el pueblo pueda pronunciarse. Y díganse cuales son las formas que tiene para hacerlo. La idea de que el pueblo se manifieste libremente es fundamental. Hay varias formas de hacerlo, una es el referéndum, otra las elecciones en las que se apele a la soberanía nacional y al poder constituyente del pueblo.
Si niegan el referéndum y hay elecciones, acudamos a ellas con una alianza por la República y ganamos, si las candidaturas de izquierda y republicanas ganan en sitios significativos, la mascarada de la monarquía quedará indefensa, al descubierto. La combinación de las fuerzas nacionalistas y un Frente por la República será letal para el régimen. Para esta acción coordinada no se precisa unidad orgánica, basta con dejar claro que se está en contra del régimen y un programa base.
Si se participa en un referendum sin garantís y se pierde se está legitimando al contrario y sus resultados. Unas elecciones constituyentes, por el contrario tienen otra lógica.
Ese es un escenario para el que nos debemos preparar. ¿Estarán nuestros partidos y dirigentes a la altura?
Dense los pasos para formar una amplia Alianza Republicana que coordine la lucha a partir de ahora. Las organizaciones que intentan coordinar estas luchas tienen obligaciones, pero su responsabilidad es mucho más amplia. No vamos a quedarnos callados, Con un 1977 ya hubo suficiente.
El PSOE ha expuesto claramente su posición a favor de la Sucesión y la Monarquía. Unidos al PP bloquearan todo intento de Referéndum, que puede quedarse como la excusa para salvar la cara de los que hoy, en la izquierda, no se atrevan a actuar como deben.
En su comunicado de hoy día 2, PODEMOS llama a los ciudadanos a debatir, participar y exigir que se oiga su voz pero no cita ni una sola vez la República. Algunos consideramos que es preciso explicitar de qué lado se está, de lo contrario lo que se está haciendo es el juego al sistema que se pretende cambiar. Sumar fuerzas es fundamental. Cualquier persona o grupo que sea contrario al bipartidismo y al Régimen y que esté por un cambio con un contenido social y solidario es nuestro aliado. Es tan sencillo como eso. Empléense las palabras que se quiera, pero la unidad debe hacerse sobre el rechazo inequívoco al régimen.
Si no hay referéndum por motivos legales, no pasa nada, acúdase a las ELECCIONES con un FRENTE AMPLIO de resistencia. Podemos ganar. Las fuerzas con representación parlamentaria y recursos tienen una gran responsabilidad. No es momento de ambigüedades.
Hemos de dar los pasos necesarios para ese objetivo. Nos jugamos el futuro.
Agrupación al servicio de la República